Este reporte de Deborah Castellano Lubov sobre el Cardenal de Nueva York Timothy Dolan fue publicado en Vatican News el 30 de agosto.
A medida que la guerra en Ucrania continúa, el cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York, dice que otra ventaja de la reunión de los cardenales del mundo que el Papa Francisco convocó fue estar con los cardenales que están en la primera línea, para escuchar sobre los desafíos que enfrentan y aprender de su servicio.
En una entrevista con Vatican News el lunes, el cardenal Dolan, quien se desempeña como presidente de la Asociación Católica para el Bienestar del Cercano Oriente (CNEWA), reflexionó sobre el primer día del encuentro de dos días en el Vaticano para discutir sobre la reforma de la Curia Romana, y destacó específicamente la solidaridad de los cardenales en la lucha contra la guerra y la ayuda a los necesitados.
El Papa Francisco pidió que los cardenales del mundo se reunieran en el Vaticano del 29 al 30 de agosto para reflexionar sobre la recientemente publicada Constitución Apostólica Predicate Evangelium, sobre la reforma de la Curia Romana.
Según estadísticas de la ONU de julio, al menos 12 millones de personas se han visto obligadas a huir de sus hogares desde el estallido de la guerra, con al menos 5 millones huyendo fuera de Ucrania a países fronterizos, y al menos 7 millones de desplazados dentro de la nación devastada por la guerra.
Desde que Rusia invadió Ucrania, unos 2 millones de ucranianos han encontrado bienvenida en Polonia, y muchos otros en Hungría, Eslovaquia y otras naciones limítrofes. Algunos ucranianos han comenzado a regresar a su país.
Escuchando a los Cardenales en ‘primera línea’
El cardenal Dolan dijo a Vatican News que después de su propia visita a Ucrania y las naciones limítrofes, estar entre los otros cardenales de la Iglesia Universal, y los más cercanos al conflicto, ha sido particularmente significativo.
“Esa es otra gran ventaja de estar aquí”, dijo el cardenal.
“Los cardenales, por su propia naturaleza, reflejan la Iglesia Universal, la catolicidad de la Iglesia. Estar con ellos ahora, hablar con el cardenal Péter Erdő de Budapest, quienes han sido tan extraordinariamente generosos y acogedores, estar con el cardenal Stanisław Dziwisz en Cracovia, donde han sido acogidos por el pueblo de Polonia, cerca de 4 millones de refugiados”.
Durante una visita anterior a Roma, en abril, la primera desde el estallido de la pandemia, el cardenal Dolan se sentó con Vatican News para discutir su próximo viaje para reunirse con los afligidos refugiados ucranianos y brindarles ayuda, a ellos y a quienes los acogen.
Un encuentro “extraordinariamente edificante” en el Vaticano
El lunes por la noche, el Cardenal de Nueva York también dio sus impresiones de las discusiones que tienen lugar entre los Cardenales, y en sus pequeños grupos, calificándolas de “hermosa experiencia”.
“Es una hermosa experiencia de algo que está en peligro de volverse demasiado teórico, a específicamente, la colegialidad, la fraternidad apostólica, la sinodalidad. No, eso lo experimentamos allí”, dijo.
Expresó su agradecimiento por el encuentro.
“Me alegro de que esto haya tenido lugar. Lo esperas con ansias”, pero, hasta cierto punto, sugirió, por un sentido del deber.
“Pero dije, ‘guau’, el deber es recompensado porque esto es algo muy bueno”.
Botas en el suelo, deseando ayudar
La visita del cardenal Dolan a Ucrania y los países fronterizos a principios de este año se debió a que el arzobispo de Nueva York es presidente ex officio de la junta de CNEWA.
CNEWA fue fundada hace un siglo por el Papa Pío XI para ayudar a los católicos de rito oriental, quienes muy a menudo viven en áreas donde son perseguidos y están bajo gran estrés.
Hay muchos católicos de rito oriental en el Medio Oriente, India, Ucrania y en Europa central y oriental.
Para esa ocasión, dijo a Vatican News, “estamos muy activos, tenemos botas en el suelo, y deseamos llevarles dádivas, los regalos que los católicos nos han dado para ayudar a estas personas. Queremos simplemente abrazarlos y decirles: ‘Los amamos. No nos hemos olvidado de ustedes. Queremos orar con ustedes, animarlos y ayudarlos’”.