Con esta frase, el Papa Francisco inicia la bula papal de presentación del Jubileo 2025.
La esperanza —y ser “peregrinos de esperanza”— es el tema del año jubilar. El logotipo oficial presenta cuatro figuras estilizadas flotando en el agua, cada una de color diferente y abrazando a la siguiente. La primera se aferra a una cruz, en cuyo fondo hay un ancla, símbolo de esperanza.
Nuestro mundo está inundado de desafíos y preocupaciones que parecen interminables: la omnipresencia de la inteligencia artificial, la vulnerabilidad de la creación, una “cultura del descarte”, la falta de respeto por el carácter sagrado de la vida humana en todas sus etapas, la retórica política partidista divisiva, la devastación de las guerras y la violencia, el flagelo de la trata de personas, los desastres naturales, la desnutrición grave, la hambruna y un aumento constante de la tasa de suicidios.
En un mundo así, ¿no buscan todos un rayo de esperanza?
En la víspera de Navidad, el Papa Francisco cruzará la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro y marcará el comienzo del año jubilar.
¡Todos buscan una esperanza que no defraude! La fuente de la esperanza es el amor “que brota del Corazón de Jesús traspasado en la cruz” (“Spes non confundit”, 3).
En octubre, el Papa Francisco publicó una encíclica sobre el Sagrado Corazón de Jesús, “Dilexit nos” (“Nos amó”). Que nuestro redescubrimiento de esta devoción, una relación con Jesús en su Sagrado Corazón nos empodere y anime a ser misioneros de la verdadera esperanza en nuestro mundo.
Planeo dedicar mi columna durante el jubileo a la comprensión de la virtud de la esperanza y su conexión integral con la misión y el trabajo de CNEWA.
CNEWA como agencia de esperanza, con asociados y colaboradores, se hace evidente en la revista ONE en español.
En abril, Michael J. La Civita, director de comunicaciones y marketing, y yo viajamos con el cardenal Timothy M. Dolan, arzobispo de Nueva York y director de CNEWA, a Cisjordania, donde presenciamos el trabajo de Misión Pontificia, la agencia operativa de CNEWA en el Medio Oriente.
En julio, Tresool Singh-Conway, directora financiera, Thomas Varghese, director de programas, y yo visitamos el campamento de refugiados de Dbayeh, cerca de Beirut. Participamos en un día dedicado a identificar los signos del horror de la trata de personas, especialmente entre los niños y las jóvenes. Experimentamos el trabajo de CNEWA-Misión Pontificia en el campamento de refugiados.
Luego, en octubre, Varghese y yo viajamos a Etiopía. En el norte, junto con Argaw Fantu, director regional de CNEWA en Etiopía, nos reunimos con abune Tesfaselassie Medhin, el obispo de Adigrat, quien compartió su experiencia sobre el coraje y heroísmo de sus sacerdotes durante el horrible conflicto de dos años en la región de Tigray. También nos reunimos con abune Lukas Teshome Fikre Woldetensae, el obispo de Emdibir, y un grupo de sus sacerdotes. Todos expresaron su gratitud a CNEWA por nuestro papel en el apoyo a su formación sacerdotal.
Caminemos juntos como “peregrinos de esperanza”. Los invito a nuestra Peregrinación de la Esperanza a Roma, del 26 de abril al 3 de mayo. Visite petersway.com/cnewa.html o escríbanos a info@cnewa.org para solicitar más información. La peregrinación ofrecerá tiempo para la oración y la solidaridad y servirá como una importante oportunidad para recaudar fondos para todos nuestros esfuerzos.
Con mi gratitud y oraciones,
Peter I. Vaccari
Presidente
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